■Hay pasiones y caminos que se trazan desde muy temprana edad, este es el caso del Arq. Jorge Visconte, quien hoy desarrolla su obra al frente de INDARQ junto a otros profesionales, pero que empezó su inclinación por el mundo de la arquitectura desde niño en una visita a parientes de manera fortuita. En esta sección en la que destacamos a los profesionales del país, te invitamos a conocer más sobre su historia e inspiración.
1-¿Cuándo abraza la profesión y decide ser arquitecto?
La primera aproximación que tuve con el oficio de la Arquitectura fue cuando tenía 10 años, durante una visita, junto con mi madre, a la familia del Arq. Manuel Tarazona, con quien teníamos cierto parentesco. Me acerque a husmear su estudio, en aquel momento ver ese espacio lleno de maquetas con tantos modelos a escala de vehículos, personas, árboles etc. fue algo fantástico que aún recuerdo visualmente. En casa, de niño, tenía acceso a los materiales de dibujo técnico y de precisión que usaba mi padre para realizar cartografía militar, ese acceso temprano incidió en mi inclinación al dibujo, el punto cero de mí vocación al diseño.
A los 15 años tenía que decidir qué tecnicatura hacer en el colegio, opté por estudiar Construcciones Civiles en el Colegio Técnico Nacional (CTN). Ya tenía definido formarme con una base para luego estudiar Arquitectura. En el colegio conocí a Osvaldo Lombardo, amigo y colega, con quien iniciamos una amistad, luego fuimos compañeros de facultad y hoy somos socios en INDARQ. Durante ese periodo, mi madre me obsequió unos libros de historia del arte que me marcaron y aparecieron en el momento justo, ya que me permitieron entender mejor la arquitectura y el arte. Con eso, a los 16 años, desaparecieron las dudas, quería ser Arquitecto y Artista.
2- ¿Cómo fueron los comienzos de su carrera y conformación del estudio INDARQ? ¿Quiénes son parte del equipo hoy?
Mientras estudiaba trabajé varios años en agencias diseñando encargos que iban desde objetos hasta espacios. En 2009, hay un punto de inflexión: siendo todavía estudiante, con los compañeros Olga Villagra, Jorge Ortiz y Leonardo Florentín, obtuvimos el 1er. premio del concurso de “Ampliación de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte (FADA)”. Fue desafiante y significativo, porque estaría construido en nuestra casa de estudios. El Auditorio FADA, los bloques de Diseño Industrial, de Música y de Aulas, resultaron de ese proyecto al que considero una «Ópera Prima», por su escala y la experiencia que me dejó a nivel profesional y personal, por el tiempo compartido proyectando junto con colegas a quienes aprecio y admiro.
En 2013, con Osvaldo Lombardo, realizábamos nuestros primeros trabajos juntos, en su mayoría encargos de otros estudios y profesionales, que nos ayudaron a carretear este periodo preliminar. En 2015, oficialmente el estudio se define en un espacio físico, nos hacemos socios y fundamos INDARQ.
3- ¿Ha tenido alguna experiencia en el campo de la docencia?
Inicié en 2014, como auxiliar de “Arquitectura 7” en el “Taller B” de la FADA con la Arq. Graciela Goiriz. También estuve unos años en la Universidad Católica de Asunción (UCA) junto con el Arq. Christian Ceuppens. Actualmente estoy en el «Taller F» en FADA.
4- ¿Cuáles son los ideales y métodos que le inspiran en el ejercicio docente y busca trasmitir a sus alumnos?
Tenemos varios ejes transversales en el proceso y ejercicio de proyecto. Buscamos una arquitectura articuladora entre el habitante, situado en el espacio, y el espacio situado en la conciencia colectiva, por medio del desarrollo de una sensibilidad que permita operar en un contexto con responsabilidad. Pensar el lugar y el usuario en sus dimensiones tangibles e intangibles. Desarrollar esa sensibilidad hacia el sitio y el usuario como un ser social y cultural, ayuda a que el proyecto no termine siendo solo un elemento con fines de “seducción” visual; sino que en el proceso del mismo también se le asigna un significado mental colectivo, simbólico y expresivo, siendo su composición formal expresión de un análisis de la lógica estructural, constructiva y expresiva de su materialidad.
5- ¿Qué cosas, como profesional, se ajustan o cambian al ser docente?
El ejercicio docente implica estar en un constante ajuste y revisión, no lo considero un proceso lineal y unidireccional, existe una retroalimentación constante de ambos lados de la “mesa de corrección”. Me cuesta definir qué cosas cambian, porque es algo que inicié con mi vida profesional, entonces no tuve una separación de la facultad, sigo aprendiendo constantemente de ese entorno y atmósfera que tiene la universidad.
«La arquitectura, más allá de su expresión formal, es una experiencia en el espacio, una extensión no solo del cuerpo físico, sino también de lo mental y emocional. Cuando un grupo humano o una persona se identifica o representa en el espacio que habita, este resuena de manera inconsciente con él, sus sentidos, el paisaje y la materia que construye la arquitectura, entonces estamos ante una experiencia arquitectónica.«
6- ¿Interpretar o crear Arquitectura? Siendo un área multidisciplinar ¿Qué pensamiento tiene al respecto?
Ambas dimensiones. Añadiría también “reinterpretar”, que debería ser lo más frecuente sobre el ejercicio de arquitectura que uno mismo hace. La arquitectura, más allá de su expresión formal, es una experiencia en el espacio, una extensión no solo del cuerpo físico, sino también de lo mental y emocional. Cuando un grupo humano o una persona se identifica o representa en el espacio que habita, este resuena de manera inconsciente con él, sus sentidos, el paisaje y la materia que construye la arquitectura, entonces estamos ante una experiencia arquitectónica.
7- ¿Cuál es su visión de la Arquitectura en Paraguay?
Sin duda estamos en un periodo de fuerte consolidación de la profesión y el ejercicio de la arquitectura no solo a nivel local, evolucionando sobre las bases que nos dejó el modernismo en Paraguay, y también los años que tienen las escuelas de arquitectura. Mientras que a nivel internacional ganamos visibilidad y posicionamos nuestra arquitectura gracias a los proyectos que nos representan a nivel regional y global. Tenemos un excelente nivel de Arquitectura y profesionales en Paraguay. Aun así, seguimos con una tarea pendiente: la ciudad. El derecho a la ciudad, así como la accesibilidad y calidad del espacio público siguen siendo puntos pendientes. Cuestiones que son más complejas porque involucran voluntades políticas, económicas y procesos multidisciplinarios.
8- ¿Cuál es su inspiración, profesionales y obras que admira?
Admiro a varios, tuve la suerte de tener algunos profesores muy humanos y humildes al trasmitir su conocimiento. Más que arquitectos me inspiran muchas arquitecturas, emociones, el arte en su amplitud. Me motivan e inspiran mi hijo, mi familia y amigos. Este es un periodo en que muchas cosas se explican en la experiencia de verlo crecer.
9- Un mensaje para los que se inician en la carrera de Arquitectura.
Mantener el entusiasmo, la curiosidad, intentar ser sensibles y comprometidos al diseñar.
